lunes, 18 de marzo de 2013

CHILOÉ, TIERRA DE DUENDES

Palafitos, Castro
Palafitos, Castro

Uno de los lugares que más ansiaba conocer durante mi viaje a Chile era, sin duda, la isla de Chiloé. Situada al Sur del país, tiene fama de lugar mágico, tanto por las antiguas leyendas que en la isla habitan, así como por la diferente forma de vida de sus gentes, cultura, gastronomía y clima.

Está formada por la isla Grande, y por un gran número de islotes e islas de menor tamaño. El archipiélago está formado por diez comunas, de entré ellas destaca por ser la capital Castro, pero no se debe obviar ciudades como Ancud, Quellón, Quinchao, Dalcahué o Chonchi.

El clima del archipiélago es un factor principal para entender la forma de vida de sus habitantes, llueve mucho, casi en todas las épocas del año, pero eso le da un aspecto único en Chile, alimenta las leyendas de brujas y duendes en sus bosques, y la hace única.

Interior de la catedral de San Francisco de Castro
Interior de la catedral de San Francisco de Castro

Una de las razones para visitar Chiloé es su arquitectura, a nadie se le puede pasar por alto dos de sus riquezas turísticas, las iglesias de madera, Patrimonio de la Humanidad, y sus palafitos.

De las primeras, su ejemplo más importante es la iglesia de San Francisco, en Castro. En su mayoría datan del s.XVIII aunque hay alguna del s.XIX. Suelen tener forma rectangular y cubierta a dos aguas, su torre suele ser de forma octogonal y la fachada suele tener un pórtico con arcos, entre 5 y 9, aunque algunas no tienen.

Los palafitos son edificaciones sobre pilares de madera en el agua, para un mejor aprovechamiento de la costa, y para favorecer la expansión comercial. Sólo quedan en Castro y en Mechuque. Los palafitos no son originarios de Chiloé, se han construido en todos los continentes, en paises tan dispares como Noruega o Birmania.

En Castro se pueden encontrar palafitos en las entradas Norte y Sur, son de madera de luma y suelen tener sus fachadas pintadas de vivos colores, si bien sus habitantes sufren problemas de salud a causa de la contaminación del agua y la falta de alcantarillado.

Por ultimo cabe destacar de su arquitectura el uso de las tejuelas, trabajadas por los colonos alemanes que se asentaron en la zona. El revestimiento de las fachadas con esta tipología, tiene dos aspectos importantes, los vivos colores utilizados, y los diferentes dibujos recortados en sus terminaciones.

La madera utilizada es alerce, por su resistencia a la humedad, tenían forma rectangular, 60cm de largo y 10-15cm de ancho. Se colocan unas sobre otras para evitar el paso de la lluvia o el frío.

El toque gastronómico lo vamos a poner con un plato muy especial, típico de la isla, el curanto. Se prepara cavando un hoyo en la tierra, se colocan dentro piedras calientes, y por último se añaden los ingredientes. Cada capa de alimentos se cubre con hoja de nalca, y en la parte superior se coloca un plástico para que se cocine al vapor durante hora y media.

Quizás la originalidad es que mezcla ingredientes tan dispares como marisco (almejas, mejillones), patatas, carnes (ternera, cordero, pollo, cerdo) y embutidos (longanizas). Yo me lo comí enterito.

Sin dudarlo volvería a Chiloé, es un lugar donde te puedes perder y dejar pasar el tiempo. Siempre hay algo que ver, rutas por descubrir y gentes para conversar.

domingo, 24 de febrero de 2013

ISLAS PERHENTIAN........EL PARAÍSO

 

Playa en Pulau Besar

Seguramente nunca conoceremos unas playas tan increíbles como las de las islas Perhentian, playas de arenas blancas y finas, cocoteros, pocos viajeros y mucha fauna marina hacen de ellas una delicia para los sentidos.

Las islas, formadas por Pulau Kecil y Pulau Besar, están situadas en la costa Noreste de Malasia, cerca de la frontera con Tailandia. Ambas se encuentran dentro del Parque Marino Nacional de Pulau Redang, por lo que está prohibido recolectar corales o echar desperdicios.

Afortunadamente ayudan algunos factores a mantener vírgenes estas islas, no hay coches y hay poco turismo, debido a que la oferta hotelera es ínfima, y por lo general visitar las islas sin alojamiento contratado es tarea imposible.

Cabaña watercolour resort en Pulau Besar

Aunque el alojamiento puede ser muy económico (desde 10 euros), nosotros nos decidimos por una cabaña con aire acondicionado y baño privado por 20 euros el día. Generalmente los alojamientos son también centros de buceo. No esperes lujo asiático, pero puedes encontrar buenos lugares calidad-precio, nosotros estuvimos en el Watercolour island resort y nos gustó bastante.

La comida y bebida suele ser algo más caro que en la península, pero aún así sigue siendo mucho más económico que España. En algunos lugares por ser una zona conservadora e islámica no venden cerveza.

Es muy habitual que los restaurantes, por la noche, monten sus mesas en la arena y, con la única iluminación de las velas, sirvan barbacoas de pescado y mariscos a precios realmente económicos. Puedes elegir que pieza quieres comerte, sólo debes señalarla y a la barbacoa.

Vistas desde nuestra cabaña

Las Cabañas, situadas en primera línea de playa, ofrecen unas vistas y una tranquilidad como no encontraremos en ningún lugar del mundo. La fauna marina comprende tiburones de punta negra, peces loro jorobados, barracudas, pez payaso (nemo), tortugas o rayas, es realmente alucinante nadar junto a tortugas enormes, me emocioné, lo confieso..... Y puedes encontrar todo esto a soló unos pocos metros de la orilla.

Lo habitual es contratar una excursión para bucear, te llevan en barco, a unos 100 metros de la orilla, y hacen un recorrido por las diferentes playas. Yo decidí ir a nado desde la orilla, y a la vuelta lo pasé fatal, tengo que decir que no soy Michael Phelps.

Barcos de pesca y buceo

Hay varias formas de llegar hasta estas paradisiacas islas, todas pasan por embarcar en Kuala Besut, pagar el ticket de la lancha rápida, y el ticket del Parque Nacional, para la conservación de la zona. Para llegar hasta allí, se puede tomar el "tren de la jungla" que cruza la selva pluvial más antigua del mundo, el Taman Negara y llega hasta la frontera tailandesa. Si llegas desde las Cameron Highlands, como nosotros, se puede ir en mini van y te dejan en el mismo embarcadero. Nosotros decidimos hacer noche en Kota Bharu, la ciudad más grande de la región.

Desde luego que Kota Bharu no es un buen lugar para hacer noche, no hay nada que ver, pocas opciones de alojamiento limpio y económico, y te alejas de la zona de embarque a las islas, pero las aventuras que pasamos en el hostal chino donde nos alojamos quedarán en nuestro recuerdo.

Nuestra playa
Ardilla voladora

La fauna terrestre tiene gratas sorpresas, como esta ardilla voladora que encontramos mientras desayunábamos en el restaurante, parece una mezcla de murciélago y koala, y no se movió en toda la mañana.

Además hay varanos, que son lagartos gigantes que campan a sus anchas por las islas, nosotros los vimos en la playa y son realmente grandes, pero no son para nada peligrosos.

Atardecer en Pulau Kecil

La primera vez que visitas las islas, cuando debes elegir donde alojarte, siempre se duda si es mejor Besar o Kecil, yo creo que depende de lo que se busque, por lo general Pulau Kecil tiene alojamientos más sencillos y económicos, con más restaurantes y marcha, por lo que suele haber viajeros más jóvenes. La playa más conocida es Long Beach, de arena espectacular pero con mucho ajetreo.

Por el contrario, Pulau Besar es más tranquilo, no hay tanta variedad de restaurantes, y los aojamientos son de mejor calidad. En todo caso la comunicación entre ambas es muy fácil debido a los llamados "water taxi" , que trabajan incluso por las noches.

La otra forma de moverse por las islas es cruzando la jungla por algunos senderos existentes, de estar forma puedes encontrar playas aún más solitarias.

Las vistas durante mis vacaciones

 

domingo, 10 de febrero de 2013

ISLAS LOFOTEN, MAGIA EN EN EL CÍRCULO POLAR ÁRTICO

 

Puerto de Å
Puerto de Å

Siempre que uno viaja a un nuevo destino se pregunta si tantos km habrán sido en vano, y aunque hayamos visto fotos, leido opiniones en foros o buscado información en internet, no hay nada como sentir la huella del triunfo al pisar ese maravilloso lugar, y saber que la elección ha merecido la pena.

Apostamos fuerte con las islas Lofoten, no teníamos pensado subir más al Norte de Trondheim, pero una imagen del pueblecito de Reine nos hizo cambiar de idea, subir hasta el círculo polar Ártico, y pasar en estas islas mágicas los mejores cuatro días de nuestra estancia en Noruega.

Las islas se encuentran por encima del círculo polar Ártico, pertenece a la provincia de Nordland y la forma más sencilla de llegar es desde Bodo en ferry. Nosotros así lo hicimos, la travesía dura unas tres horas, y aunque el ferry no es demasiado cómodo, las ganas de llegar a nuestro destino nos hizo más ameno el trayecto.

Alojamiento en Å

Elegimos el pueblecito de Å (pronunciese o) como base para descubrir las islas, el enigmático nombre y estar situado al final de la carretera que cruza el archipiélago fueron primordiales para su elección, y no nos equivocamos, la estancia fue increíble, no había casi viajeros, la tranquilidad era el lema de sus habitantes, y nuestro alojamiento en una cabaña de pescadores hizo que nos enamorásemos de este encantador lugar.

Lo habitual es dormir en este tipo de Cabañas, conocidas como rorbu, preparadas para los viajeros, y en su mayoría sobre el mar, soportadas por pilotes de madera. La nuestra se llamaba hellvåg, dos habitaciones, cocina, wifi y un dueño maravilloso.

Reine

Sin duda la perla de las Lofoten es Reine, postal para definir las maravillas de estas islas. Rodeada por montañas y mar, tranquila y bien situada. Desde aquí se pueden alquilar bicicletas para recorrer los diferentes pueblos, playas y fiordos que conforman esta zona del Ártico.

Montañas y fiordos
Los habitantes de las islas, unos 25.000 siguen viviendo de la pesca y de los secaderos de bacalao, los encontrarás por todo el archipiélago, además el olor es apreciable. Desde hace unos años el turismo va tomando importancia. También se puede avistar ballenas dependiendo de la temporada. En Agosto aún se aprecia el sol de medianoche, no termina de oscurecer, mirar por la ventana a las tres de la madrugada y ver el sol es chocante, pero al final te acostumbras.

Descubrir sus paisajes en bicicleta es la forma más divertida, no hay muchos automóviles, por lo que es un método barato y seguro de moverse. La fauna de la isla va desde frailecillos hasta ovejas, y los podrás ver fácilmente.

Una playa en Moskenes

Las playas también son espectaculares, desde luego lo de bañarse no es lo más aconsejable, pero la belleza salvaje de estas costas bien merece pedalear y escalar hasta llegar a ellas. Después, en la rorbu, el acogedor fuego de la chimenea, un café caliente y un buen libro pueden conseguir que tus días de vacaciones sean en estas tierras inolvidables.

Cubiertas ajardinadas en Reine

Podríamos haber estado semanas aquí, incluso meses, su tranquilidad atrapa, y cuatro días solo dan para una pequeña parte de las islas, pero volveremos, ya no quedan tantos lugares para desconectar de las grandes urbes.

Para despedirnos en nuestra vuelta a Bodo, las islas nos obsequiaron con esta bonita puesta de sol, como ese regalo que sabes te llegará en cualquier instante.

Puesta de sol